Este fue un año difícil, en el que los médicos tuvieron que dar el paso al frente para combatir a un enemigo invisible y tenaz.

Existen muchos médicos -y muy buenos- entre nuestros exalumnos. Algunos de ellos son padre e hijo, y con la misma especialidad. Y eso fue lo que buscamos con este reconocimiento: valorar a dos personas de bien, dos excelentes médicos, reconocidos en su comunidad profesional, dos personas muy especiales y queridas.

Miguel es camada 58 y Maiko, su hijo, camada 83. Hombres de convicción, de profunda fe y amor por su familia y su vocación. Este año, además, celebrando 65 años de la Asociación de Exalumnos, propusimos que el premio tenga un nuevo nombre, "Viriliter Age", que es el lema de la Asociación. "Act manfully", sería su traducción al inglés, u "obra como un hombre de bien", en castellano.

Miguel y Maiko encarnan, ambos, el "Viriliter Age". Por eso, por primera vez en 65 años de Asociación, premiamos a dos exalumnos como distinguidos: padre e hijo. Por eso, y porque se lo merecen.

¡Felicitaciones, Miguel y Maiko!